Un viaje por Latinoamerica, buscando encontrarnos en nuestras luchas, compartiendo nuestros saberes, construyendo comunidad, aprendiendo siempre...

Partimos en febrero del 2009 desde Buenos Aires, Argentina, sin tiempo, con nuestras preguntas y nuestras convicciones a cuestas, con las ganas de conocer(nos) el continente, de aprender(nos) las historias, las cosmovisiones, las búsquedas y las construcciones colectivas, transmitiendo también ese conglomerado de experiencias y luchas que fuimos y seguimos construyendo en nuestro suelo rioplatense.

Trabajando con la fotografía y ejecutando folklore latinoamericano en bares y colectivos llegamos en el 2011 a México y desde allá regresamos al puerto del río de la plata. Como les pasa a todos lxs que se encuentran en los desencuentros del viajar, la mochila nos persigue y seguimos regresando a esa latinoamérica que nos abraza en sus luchas cotidianas.

Abrimos este pequeño espacio para compartir algunas de las vivencias y las producciones que paso a paso vamos trabajando: relatos de las experiencias educativas en las que participamos, crónicas de talleres en las comunidades, notas publicadas en algún medio, producciones de radio, escritos mezclados...

sábado, 7 de agosto de 2010

Recreación en la Escuela de Formación de la Costa de la CONAICE, Ecuador.















Continuando el camino trazado por la Escuela de Formación Política Dolores Cacuango, el movimiento indígena ecuatoriano desarrolla diferentes experiencias educativas. La Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Costa (CONAICE), instancia organizativa de las nacionalidades Awá, Epera, Chachi y los pueblos Manta y Wankavilka, desarrolló su segunda escuela de formación política en septiembre del 2009. Allí estuvimos, acompañanado a la querida y admirada Olimpia, facilitadora del encuentro, que habíamos conocido en Puno, Perú, en la IV Cumbre de pueblos y nacionalidades indígenas del Abya Yala. Como otras veces, nos ofrecimos a participar de la forma que los y las organizadoras consideraran, y entre guitarra y charlas terminamos coordinando varias dinámicas de recreación orientadas al juego cooperativo y al autoconocimiento del grupo. En las imágenes podemos ver un clásico: el juego de la silla cooperativo. Como es sabido el juego consiste en caminar alrededor de las sillas mientras suena la música. La facilitadora retira una silla y ahora todos y todas deben sentarse en las sillas que quedan, si aguien queda de pie, todos pierden. En este juego el grupo debe cooperar para lograr el objetivo, por eso decimos que se trata de un juego cooperativo. Al terminar, todos deben quedar sentados en una sola silla.
Esta dinámica resulta útil para pensar los valores que aprendemos en los juegos tradicionales y para reflexionar sobre la formación que recibimos al ser pequeños.